Como su propio nombre indica, esta obra fue realizada durante el pensionado de Lloréns en la Academia Española de Roma, situada en el monte Gianicolo, desde donde hay una de las vista más bella de la capital italiana. Esta imagen ha sido tomada al atardecer, momento en que el sol se pone tras este monte, bañando con su luz la ciudad. La sombra del primer término, resalta el efecto lumínico de la ciudad, apenas esbozada como una masa de brillantes colores. A pesar de tratarse de una obra de pequeño tamaño, según el formato de muchas de las obras y apuntes veloces realizados en esta etapa, aporta interesante información del rumbo que estaba tomando la pintura de Lloréns. La técnica es claramente impresionista, así como el predominio del color y el encuadre seleccionado, dejando el primer plano vacío y concentrando los personajes y objetos en el plano medio. Asimismo, el tamaño de la obra y la horizontalidad, demuestran que Lloréns ha conocido la obra de los macchiaioli, un grupo de artistas italianos que realizaba un tipo de pintura basada en la captación de la luz mediterránea y basada en la pintura, en lo que puede ser un equivalente del luminismo español.