De carácter abstracto, la pieza Deixou de soñar muestra un torbellino de color en el que las diversas tonalidades se superponen unas sobre otras. Resulta interesante el uso de la veladura, pues la primera capa aplicada es negra, así que lo que la artista hace es dejarla a la vista en algunas zonas, como por ejemplo, la superior izquierda, y sobre ella va distribuyendo otra serie de colores que oscilan entre el azul, blanco, amarillo y rosa. Sin embargo, gracias a estas veladuras, consigue que en muchas ocasiones el fondo siga siendo visible a través de las capas de pintura.