Nació en A Coruña en 1953. Su juventud coincidió con los años sesenta, época que marca su carácter de libertad e innovación. A esta generación pertenecen también otros artistas como Chelín o Zapata; con ellos, Cabanas comenzó a desarrollar un arte de estética postcubista donde ya se vislumbraban características de la abstracción.
En 1970 viajó por Europa, sobre todo a París, y tres años más tarde participa en la muestra «Arte Joven de Galicia». En 1975 creó el grupo Sisga, formado, entre otros, por Fernando García Varela, Tomás Roures, Gonzalo Viana y Xosé Espona, artistas centrados en explorar actitudes rupturistas y combativas de la creación plástica. Es aquí donde Cabanas conectó con el constructivismo, la abstracción, el pop americano y la nueva figuración, idea vertebral que constituía este grupo. Paralelamente colabora con el Grupo A Carón, donde también llevaba a cabo actividades de innovación y de ruptura.
Un hecho importante en la vida artística de Cabanas fue el nacimiento de la Galería Mestre Mateo. Aquí, él y sus compañeros comenzaron a tomar contacto directo con la pintura y los artistas del momento: Le Parc, Cecil King, Nawar o Leopoldo Nóvoa. En esta época, Cabanas trabaja el campo de la abstracción, en obras de sencillez geométrica, estática, fría, distante y de una gran radicalidad en la representación, difícil de aceptar por el público, tal y como reconocía el propio artista.
A finales de los años setenta, formó parte del colectivo La Galga, grupo cultural de ruptura, con ganas de fusionar diferentes artes y ampliar horizontes. Las obras de ésta época son una provocación constante.
En 1980 entró a formar parte del grupo Atlántica. A principios de esta década, exploró diversos mundos plásticos relacionados con la abstracción, aunque introduce algunas versiones retro de sus obras figurativas. También dedicó parte de su actividad al arte postal, experiencia que le resultó enriquecedora pero que duró poco tiempo.
A finales de la década de los ochenta, surgió una nueva etapa artística que él mismo ha denominado «de la piedra». Recorriendo las calles y visitando monumentos, se despierta en él un interés por lo medieval, por las manifestaciones de la piedra a lo largo de los siglos. El hecho de estar continuamente en la carretera visitando diferentes lugares lo obliga a desarrollar una técnica de abstracción, sintética y rápida, de formas esenciales. En estos años también colaboró con la asociación cultural Tralla, y renace en su obra la cultura marinera.
Después de esta etapa, comienza otra de permanencia en el taller; trabaja el papel y las pinturas son de pequeño y gran formato. La presencia del mar es intensa en estos años, pero también la de la muerte, con una serie de pinturas negras. Asimismo, explora el mundo de los símbolos, desde los petroglifos, marcas de canteros y referencias nórdicas, hasta la simbología de la vida y el destino. Como contrapunto, pinta una serie de parques urbanos donde encuadra escenas cotidianas.
La obra de sus últimos años parece ser una amalgama de sus etapas anteriores: figuración, informalismo, abstracción y arte conceptual conforman una obra con la que el artista pretende ser fiel a sí mismo. Fallece en A Coruña en el año 2013.
Cabanas realizó numerosas exposiciones, tanto a nivel nacional como internacional, y sus obras se encuentran en importantes espacios artísticos, como el Museo Español de Arte Contemporáneo de Madrid; la Colección Banco Exterior de España; el Parlamento de Galicia; el Palacio de Congresos y Auditorio de A Coruña, y la Colección Concello de A Coruña.