A lo largo de la Historia del Arte son numerosos los artistas que se ven atraídos por el tema mitológico. Isidoro Brocos, a pesar de ser un autor en cuyas obras sobresale la temática costumbrista, no podía dejar de tratar este tema. Lo hará insuflando alma a estos cuerpos divinos y representándolos con gran expresividad. El contorno de la figura se resalta del fondo a través de un trazo firme y mediante una línea gruesa más oscura que permite que la silueta quede bien delimitada.

A pesar de que la imagen ha sido identificada con Diana, diosa de la caza, por estar acompañada por un venado, apenas insinuado, la imagen no sólo carece de los atributos propios de esta diosa, sino que propondría una iconografía inusual para la misma. Diana, hermana de Apolo, era una diosa virgen, y por ello se la suele representar vestida. Únicamente en el pasaje del baño, puede aparecer desnuda, pero de ser así no aparecería sola, sino acompañada por sus ninfas. Por ello parece precipitado asimilar esta imagen con la de Diana- Artemisa, a no ser, que se tratase de una interpretación muy libre del artista, que parece inspirarse en otro tipo de imágenes.