La escultura de Leiro es una síntesis entre tradición y vanguardia.
La escultura de Leiro es una síntesis entre tradición y vanguardia.
La escultura de Leiro es una síntesis entre tradición y vanguardia. En sus creaciones, la tradición escultórica —de raíz gallega— se moderniza mediante la inclusión de elementos anticlásicos o nuevos materiales que le confieren un aspecto innovador e, incluso, cierta extrañeza alimentada por la ambigüedad temática.
En todas sus obras apreciamos una parodia de la vida y un uso incesante de la metáfora, que emplea para narrar un hecho por medio de la escultura; a veces, de forma burlona e irónica, otras, de forma más severa, pero siempre buscando ese trasfondo que en Muda o Cacho se refleja a través de la máscara que esconde al personaje y de la que trata de deshacerse.
Su escultura se basa en la ausencia de prejuicios formales y en la absoluta libertad de la mirada. Por ello se permite mezclar en esta creación lo horrible y bestial con algo de vitalismo, evidenciados a través de un excesivo tratamiento plástico. Muda o Cacho pertenece a un grupo de piezas de carácter duro y de áspera evidencia, sin tensión ni dramatismo. Es una figura titánica y enérgica que —a pesar de su monumentalidad— no transgrede el espacio sino que se concibe como un elemento integrador de este.