En Oiseaux dans la nuit Lam plasmó todo su ideario artístico, resultado de múltiples influencias refundidas: de Picasso, en la simplificación geométrica de las formas, o del arte primitivo, entre otras.
En Oiseaux dans la nuit Lam plasmó todo su ideario artístico, resultado de múltiples influencias refundidas: de Picasso, en la simplificación geométrica de las formas, o del arte primitivo, entre otras.
En Oiseaux dans la nuit Lam plasmó todo su ideario artístico, resultado de múltiples influencias refundidas: de Picasso, en la simplificación geométrica de las formas, o del arte primitivo, entre otras. Lam descubrió el arte negro gracias a Picasso, pero su origen afro-cubana lo impulsó mucho más allá, profundizando en la recuperación de algo que era parte de su tradición ancestral. Su pintura se convirtió en una reivindicación de sus raíces, no solamente desde un punto de vista formal, como hizo el artista malagueño, sino que en ese proceso también puso en juego todo el mundo espiritual y mágico de la religión vudú, que él descubrió con Breton en Martinica en los años cuarenta.
En Oiseaux dans la nuit, como su título indica, aparecen unos pájaros, que son orishás procedentes de las religiones animistas afroamericanas, presentes en el vudú caribeño y en el candomblé brasileño, que se mueven en un espacio neutro, limpio, a diferencia de las abigarradas escenas de jungla de los años cuarenta. Las figuras se simplifican: son planas, más puras y elegantes, dotando esta obra de una gran belleza que resalta dentro de la producción de Lam.