En el anverso hay una vista de una ciudad, donde se observa, al fondo, la cúpula de una iglesia y en primer término unos árboles. Se trata de un apunte tomado del natural que no llega a finalizarse. En el reverso hay un estudio de otro paisaje distinto, donde se observan figuras humanas, sobre todo de mujeres, que aparecen vestidas con traje tradicional gallego.