A lo largo de la trayectoria artística de Arturo Souto hallamos, además de sus óleos, una gran cantidad de ilustraciones para libros, bocetos y dibujos, como el que aquí se nos presenta. Probablemente se trate de un apunte para uno de los muchos retratos, que realizó y que quedaría sin terminar. Souto representa a una muchacha joven, sentada frente al espectador y en actitud pensativa, como el propio título indica. Ese ensimismamiento, la aleja del espectador, pero transmite la profundidad del personaje, caracterizado por la serenidad y el sosiego. A pesar de ser un boceto, apreciamos con claridad los rasgos físicos de la joven, sobre todo los faciales, donde el artista parece recrearse. El contorno de la figura, se delimita por medio de un trazo suelto, abocetado, y utiliza el sombreado para dar forma al pelo y ubicar a la figura en el espacio, proporcionándole volumen y estabilidad. Souto ha dejado muchas obras de su faceta como retratista, incluyendo bocetos de gran belleza, de los que este dibujo es buen ejemplo.