Se trata de un hermoso dibujo realizado en lápiz azul sobre papel sepia, donde Picasso representa a cuatro mujeres vistiéndose. Este tipo de apuntes nos traslada al París de la belle-époque, ambiente en el que el artista estuvo inmerso durante su etapa parisina; por ello,el tema de los burdeles, el cabaret, la marginación y la bohemia artística estará muy presente en su obra durante esta etapa.
Por el año de su creación sabemos que el dibujo pertenece ya a la etapa azul de Picasso, de ahí la tonalidad del lápiz, aunque aquí no se evidencien demasiado la meditación, la soledad o la amargura que definieron este periodo, cuyo inicio estuvo marcado por el suicidio de su gran amigo Carles Casagemas. Técnicamente, realiza una sencilla composición en un primer y único plano, donde sitúa a las cuatro figuras, tratadas de forma sumaria, a grandes rasgos. A pesar del desinterés por dotar de profundidad la composición, logra la sensación de espacialidad mediante las distintas poses de las figuras. Sus formas aparecen delimitadas mediante una línea gruesa y consigue dotarlas de volumen a través del sombreado. Picasso aprovecha la tonalidad sepia del papel para las carnes y aplica un leve toque de blanco que, junto al sombreado, materializan las diferentes prendas de vestir de las muchachas. Lo más destacable es la facilidad que Picasso tenía para el dibujo, demostrando un dominio absoluto de la línea, limpia y precisa, que no abandonó nunca.