«¿Deixou sen viño á seu pai?
¡Boa tunda ll’espera na casa!»
«¿Deixou sen viño á seu pai?
¡Boa tunda ll’espera na casa!»
Esta escena de amarga ternura es una ilustración con un pie dialogado. El comentario es como una reflexión del mismo Castelao. El niño llora desconsolado pensando en lo que le espera al llegar a casa sin el encargo. El autor muestra de nuevo su desacuerdo ante las costumbres de los padres represores, que se hacen respetar mediante la violencia y como consecuencia sus hijos crecen atemorizados. La figura infantil aparece caracterizada como de una familia pobre, con la ropa remendada y grande (seguramente heredada de sus hermanos), y descalzo. Hay una ausencia total de elementos accesorios, la escena se centra en el niño, realizado con líneas sintéticas y esquemáticas, y una botella de vino rota, causa de los llantos.