«- ¡Ja, ja, ja! El hombre más bueno del mundo y dice que ha tenido ideas anarquistas cuando era joven. ¡Ay, que risa!»

Cousas da vida

«―¡Ja, ja, ja! El hombre más bueno del mundo y dice que ha tenido ideas anarquistas cuando era joven. ¡Ay, que risa!»

En este dibujo hay una exageración en la caracterización de las figuras, ya que Castelao emplea una dualidad moral: para ridiculizar al cacique lo hace hablar en castellano, mientras que si representa a un campesino lo hace siempre en gallego. Con el mismo fin estiliza, o engorda, las formas del cacique, siendo más naturalista en las representaciones de la gente del pueblo. Ésta es una de las críticas constantes en la obra de Castelao: los caciques como opresores de la sociedad y culpables de todos los males. Es en esto donde incide Castelao, defendiendo a la gente del pueblo, los marginados, y poniendo a los caciques y a la política en el punto de mira de la crítica. El dibujo es sintético, pero caracteriza con exageración las formas de los dos personajes, uno de ellos extremadamente delgado, con traje, sombrero, bigote y gafas, y el otro exageradamente gordo, también con traje y sombrero, expresando perfectamente su situación social.

Estos dibujos fueron realizados entre los años 1922/24 y publicados en el periódico vigués Galicia.