«―Lo que pasa es que aquí todos queremos ser caciques ¿sabe?»
«―Lo que pasa es que aquí todos queremos ser caciques ¿sabe?»
En este dibujo Castelao recoje de nuevo la crítica hacia la política y esa forma de utilizarla como medio de ascenso social. El revulsivo contra el caciquismo aparece en esta escena, en la que Castelao llega a la conclusión de que todo el mundo quiere tener el suficiente poder económico y político para mandar. Y nos da a entender que en el fondo todos los políticos tienen algo de caciques, y todos quieren tener el poder de gobernar sobre los demás. El diálogo transcurre entre dos personajes aspirantes a caciques, ya que por su caracterización se ve que no son de la clase popular. Castelao los define con unos rasgos diferentes a los que utiliza para la caracterización de la gente del pueblo. Los elementos como son el puro, el bastón, las ropas, el peinado del personaje que está pensativo y el perro que coloca a sus pies, son símbolos en aquel entonces de la clase media-alta, la que aspiraba al poder. El dibujo es esquemático, pero bastante preciso. Mediante unas pocas líneas y a través de un trazo firme y continuo, nos transmite la sensación necesaria para entender la escena..